La Productividad en su sentido más simple, es el resultado que se obtiene al dividir el valor de los recursos o insumos de entrada entre el valor obtenido por los bienes producidos. También se dice que es lograr más con menos.
Muchos elementos se conjugan para lograr alta productividad: inversión en maquinaría y equipo, sistemas y procedimientos efectivos, nivel de confiabilidad de las operaciones, entre otros.
Ante todo, para seguir operando como un negocio rentable y competitivo.
¿Cómo se mide la productividad? Existen múltiples indicadores que se aplican, dependiendo del tipo de industria o negocio dónde se usen. Por citar algunos ejemplos:
Sin embargo, existe un elemento fundamental al analizar y buscar mejoras en la Productividad: las personas. La gente involucrada en las mejoras en Productividad debe ser capaz de poder razonar sus soluciones y encontrar la Mejor Solución.
Razonar la Mejor Solución es pensar en la Solución Técnicamente Correcta, por lo que, debemos apoyarnos en tres elementos fundamentales:
En un análisis sobre la Productividad en una organización, se deben reconocer o establecer tres elementos:
El Deber Ser, el estándar aceptado por la organización. Se establece por la capacidad disponible y las Mejores Prácticas que se exigen en el desempeño de las operaciones.
La realidad, que es el resultado alcanzado, medido, y comparado con los mismos indicadores del Deber Ser.
La desviación, o la diferencia que existe entre el Deber Ser y la realidad.